Usted esta en: EL EVANGELIO SEGÚN EL ESPIRITISMO > CAPÍTULO X - Bienaventurados los misericordiosos > No juzguéis para que no os juzguen. El que esté sin pecado le arroje la primera piedra > 11
11. No queráis juzgar para que no seáis juzgados. - Pues con el juicio con
que juzguéis, seréis juzgados; y con la medida con que midiéreis, os volverán a
medir. (San Mateo, capítulo VII, v. 1 y 2).