14. "Es necesario que venga el escándalo", porque estando los hombres en
expiación en la tierra, se castigan ellos mismos por el contacto de sus vicios, cuyas
primeras víctimas son y cuyos inconvenientes acaban por comprender. Cuando estén
cansados de sufrir el mal, buscarán el remedio en el bien. La reacción de esos vicios,
sirve, pues, a la vez de castigo a los unos y de prueba a los otros; así es como Dios hace
salir el bien del mal y como los mismos hombres utilizan las cosas malas o escorias.